La Inquisición de cada día. Tu verdad, no; mi verdad. Calle de la verdad, entre un río que no es río y un barrio que no es barrio. Calle de la mentira. Callejón de las lenguas de doble filo, ése es un gracioso, callejón de la pequeña muerte cotidiana en la hoguera de la verdad de Sevilla. Venid, herejes, heterodoxos, perseguidos. Sevilla debéis ser vosotros. Esos otros son unos graciosos.
A la pira nosotros con ellos.
Soldedad de una calleja con una moza que guarda eternamente en su reja.
Reja de triste memoria que se há quedado en el tiempo por la leyenda y la historia.
Historia de un corazón que unió Triana a una calle.
¡ Calle de la Inquisición !.
¿ Que sabe el amor de penas ?.
Al amanecer el día se vá a cumplir la condena.
¿ Una condena de muerte ?.
Y que importa… si yo, nunca dejaré de verte.
La noche tendió su velo, y un ciprés se hízo camino de tristeza y de consuelo.
Leyenda de un Callejón que graba en la cál su nombre, nombre de la Inquisición.