Como un loco que pretende
llevarse a una noche de la mano
y pasear con ella por el mundo.
Como un niño que intenta
romper la niebla de una tarde
para jugar a ser un héroe.
Como un poema que se pierde
en una fría madrugada
sin encontrar un pecho que lo guarde.
Así me contemplo yo,
reflejado en este mundo.
Como un loco prendido en una imagen.
Como un poema que canta su desastre.
Como un niño que va
buscando a Dios para contarle
todas las cosas tristes que le ocurren.